Al hablar de literatura mística nos referimos a un conjunto de obras que, durante el Siglo de Oro en España, expresan, de una manera literaria, la espiritualidad, el sentimiento religioso o la unión con Dios.
La literatura mística florece en el siglo XVI y representa la armonización de lo renacentista y lo barroco, colocándose en un punto medio entre el equilibrio y el desbordamiento de la expresión.
El misticismo es el conocimiento experimental de la presencia divina, es decir, haber sentido a Dios física y espiritualmente. Sin embargo, este conocimiento requiere de una serie de pasos previos mediante los cuales el individuo se va desprendiendo de las cosas terrenales hasta estar preparado para la unión con Dios. Estos estados previos se llaman la ascética.
Entre los rasgos fundamentales de la literatura mística están: las comparaciones o símiles, el uso de símbolos, y el narrador en primera persona.
Tomado y editado del libro Pensamiento y Comunicación 10
domingo, 7 de marzo de 2010
La literatura mística
Literatura del Siglo de Oro
La literatura del Siglo de Oro comprende las obras escritas durante los siglos XVI y XVII. Los dos momentos o etapas del Siglo de Oro, Renacimiento y Barroco, se distinguen por una estética muy diferente.
El Renacimiento representa el equilibrio y la armonía clásicas, y sus autores renuevan la literatura española en la naturalidad de la expresión, rechazando todo lo que es extraño al lenguaje. Predomina en su literatura el concepto del Beatus Ille.
El Barroco pertenece a una época de inseguridades y refleja las contradicciones de la vida social en un arte basado en la paradoja y en el relativismo de los valores.
Este periodo produjo un nivel artístico excepcional en la literatura española gracias al ingenio y la agudeza de una serie de escritores realmente cultos y brillantes, entre los que se destacan Luis de Góngora y Francisco de Quevedo. Prevalece en el arte el concepto del Carpe Diem.
Miguel de Cervantes Saavedra es la figura máxima del Siglo de Oro, con su obra universal, El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.
Tomado y editado del libro Pensamiento y Comunicación, 10.
viernes, 8 de enero de 2010
Eugenio María de Hostos
Eugenio María de Hostos
Datos Biográficos:
Patriota, educador, sociólogo, filósofo, ensayista y novelista. Nació en el barrio Río Cañas, municipio de Mayagüez, Puerto Rico, el 11 de enero de 1839.
Sus primeros estudios los realizó en Mayagüez, después pasó a España (Bilbao) donde cursó su bachillerato. Por voluntad de su padre se trasladó a Madrid con el propósito de estudiar leyes, pero su ideal político de independencia para Puerto Rico y la lucha constante a través de artículos de prensa y conferencias en el Ateneo de Madrid le impidieron continuar su carrera. En tierra española se unió a los núcleos políticos de tendencias liberales.
De España se traslada a Nueva York y durante dos años laboró junto a los cubanos que luchaban por la independencia de su país. Más tarde inició un recorrido por Hispanoamérica (1871) abogando por la causa cubana. Dondequiera que fue se hizo sentir como hombre íntegro y consagrado al servicio de su prójimo.
En Perú levantó su voz contra la explotación de que eran víctimas los numerosos trabajadores chinos emigrados a aquel país.
En Chile fue el primero en abogar por la instrucción científica de la mujer; perteneció a la Academia de Bellas Letras de Santiago de Chile y publicó varios escritos para esa fecha; entre ellos: una reseña histórica de Puerto Rico, un juicio crítico sobre la obra Hamlet, del dramaturgo inglés William Shakespeare (considerado como el mejor juicio crítico sobre esta obra que se haya escrito en español), y una biografía crítica del poeta cubano Plácido.
En Argentina laboró por la construcción de la primera vía ferroviaria que cruzaría la cordillera de los Andes, y lográndose tal empresa, el primer ferrocarril que cruzó la Cordillera llevó el nombre de Eugenio María de Hostos.
Pasó a Santo Domingo donde en 1879 fijó su residencia. Allí fundó en 1880 la primera escuela normal de pedagogía para la preparación de maestros. Por espacio de nueve años desarrolló en este país una intensa labor de educación. Después de la invasión norteamericana en 1898, volvió a su tierra natal. Quiso despertar el espíritu de sus compatriotas para que reclamaran en aquel momento sus derechos, fundó la Liga de Patriotas Puertorriqueños y llegó a formar parte de la primera comisión que fue a Washington para hacer valer los derechos de Puerto Rico ante las autoridades norteamericanas. Sin embargo, todas las gestiones fracasaron ante la firme decisión del gobierno norteamericano de retener a la isla como colonia y la falta de respaldo de sus compatriotas. Podría afirmarse que aunque Hostos publicó con mucho éxito tratados, ensayos, dos novelas y numerosos artículos periodísticos, su mejor obra fue su extraordinaria vida limpia, justa, humanitaria y patriótica, que lo ha colocado muy alto entre los grandes hombres de esta América. Eugenio María de Hostos murió en 1903 en Santo Domingo, lugar donde aún reposan sus restos.
Información provista por el Instituto de Estudios Hostosianos
Tarea: Redacta un ensayo comparativo de la obra de Eugenio María de Hostos con la del activista estadounidense Martin Luther King. Hallarás más información en los enlaces provistos en la columna derecha de la página.
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